¿Recuerdas los días cuando llegar a casa de la escuela significaba tirar al piso tu mochila, hacer un rápido giro en U para agarrar un refrigerio, y luego ir derecho a tu bicicleta para unirte a los demás niños del barrio y arrasar con las calles?
O ¿las vacaciones de verano cuando estabas afuera desde el anochecer hasta el amanecer subiéndote a los árboles, deslizándote sobre un cartón por las colinas cubiertas de hierba, corriendo entre los rociadores y arrojando bombas de agua?
Sé que son ideas estereotipadas, pero ¿no eran esos días los mejores cuando los únicos “dispositivos” a los que estabas pegado eran tu bicicleta o patines?
Lamento hurgar en el baúl de los recuerdos, pero el hecho lamentable es que hoy nuestros niños y adolescentes pasan entre 3 y 7 horas al día pegados a una pantalla, entre teléfonos, tabletas, computadoras y videojuegos.
Esto significa que durante todo el tiempo que pasan frente a una pantalla, nuestros hijos no están activos.
Pero, al añadir unos minutos por día al recreo o ayudar a los niños más grandes a lograr nuevas metas de entrenamiento, puedes producir un cambio en la salud de tu familia. A continuación, te decimos cómo:
Predica con el ejemplo
Es fácil pensar “Haz lo que digo, no lo que hago”, pero no podemos esperar que nuestros hijos sean activos cuando nos vean pegados a un dispositivo o batallando para separarnos de la televisión.
Si queremos que nuestros hijos tengan más energía y sean físicamente activos, también debemos despegarnos de los dispositivos, hasta una hora y un lugar determinados.
Cambia tu actitud
Los dispositivos se han vuelto parte de nuestra cultura y, de muchas maneras, hicieron que la vida fuera más cómoda, pero también nos convirtieron en más sedentarios que nunca. En el 2018, se estimaba que solo 1 de cada 3 niños hacía actividad física todos los días.
Y, si bien escucho que muchos padres dicen, como los adultos, “Bueno, así es hoy”, ¿realmente queremos que ese sea nuestro mantra?
Ayuda mucho demostrar la conducta que quisiéramos ver en nuestros hijos. Los niños que habitualmente ven que sus padres se divierten con un deporte o una actividad física tienen más probabilidades de querer ser activos también.
Poner y mantener en movimiento a nuestros hijos no tiene por qué ser complicado. A continuación, te damos algunas ideas para facilitártelo:
Actividades para hacer en familia: elige aquello que sea divertido y adecuado al nivel de desarrollo (h2)
Igual que nosotros, cuanto más disfruten nuestros hijos hacer algo, más querrán seguir haciéndolo. Guíalos para que prueben diferentes cosas al hacer actividades juntos al principio. Ve a:
- Jugar fútbol
- Intentar escalar
- Jugar vóleibol o baloncesto
- Patinar sobre hielo
- Participar en una orientación
- Jugar a la pelota
- Colocar algunas mantas viejas y luchar
- Armar una pista de obstáculos en el parque o la playa
- Jugar juegos acuáticos en la piscina local
- Hacer senderismo un día o al menos una hora
- Acampar
Ayúdalos asegurándote de que la actividad sea apropiada para las capacidades físicas de tus hijos, para que sea divertida para ellos, pero lo suficientemente exigente como para que puedan experimentar también una sensación de logro.
Si tienes dudas, primero haz que sea DIVERTIDA, y siempre y cuando todos estén a salvo, olvídate de las reglas. ;-)
Si se siente bien, alienta a otras familias o niños a participar contigo. En la mayoría de los casos, cuantos más seamos, mejor, y estar con otras personas con frecuencia ayuda a nuestros hijos a salir de su zona de confort.
Planifica
no dejes que la estación decida qué tan activos son tus hijos. Con un poco de planificación, siempre pueden sudar un poco. Para los niños también es bueno tener una rutina y saber que en ciertos días de la semana, o en fines de semana del mes, ellos o ustedes como familia van a hacer algo.
Así que, saquen sus agendas y ejercítense cuando una actividad fija les resulte mejor según sus horarios, en el medio de la tarea y otros compromisos.
Si bien, los deportes en equipo y las actividades grupales fijas son elecciones obvias, a continuación te presentamos algunas maneras más novedosas de mantener a tus hijos activos en el verano frente al invierno y actividades al aire libre frente a actividades bajo techo:
Actividades al aire libre para el verano
- Sal a caminar al parque local, o a lo largo de la playa local: obtienen puntos extras por diversión al llevar una pelota y arrojársela mutuamente mientras caminan.
- Haz burbujas y pídeles a tus hijos más pequeños que las persigan.
- Persíganse con bombas de agua de esponja.
- Dales a conocer las traes, el avioncito o uno de los juegos favoritos de tu niñez
- Jueguen al minigolf
- Vayan a una feria divertida
- Vayan a pescar/andar en bicicleta/acampar/hacer senderismo/jugar con el frisbee
- Vayan a recoger fresas o flores silvestres
- Armen una búsqueda del tesoro
- Hagan un pícnic o jueguen bádminton
- Jueguen al juego del huevo con la cuchara
- Jueguen carreras de sacos
- Jueguen en el patio trasero o parque a los Juegos Olímpicos de Verano
- Atrapen luciérnagas
- Den un paseo en motoneta después de la cena o en patines cuando el sol aún esté alto
- Salten en el trampolín
- Jueguen a apilar
Actividades al aire libre para el invierno
- Hagan una familia de nieve y píntenla con rociadores
- Vayan a esquiar, deslizarse en la nieve o andar en trineo
- Vayan a patinar sobre hielo
- Jueguen en el patio trasero o parque a los Juegos Olímpicos de Invierno
- Hagan senderismo
- Jueguen a tira y afloja
- Hagan una fogata
- Hagan ángeles de nieve
- Corran por todas partes para atrapar copos de nieve
- Jueguen hockey sobre hielo o, si eso no es posible, el hockey callejero o sobre césped es igual de divertido
Actividades bajo techo para el verano y el invierno
- Construyan un fuerte bajo techo
- Cubre tus sofás y sillas con sábanas y deja que los niños pequeños corran sobre ellos, ¡asegurándote de que no se caigan en la lava caliente que hay abajo!
- Jueguen Twister
- Pega con cinta algunas hojas de papel y jueguen al avioncito bajo techo
- Hagan guerras de almohadas
- Busca un Centro de Juegos bajo techo y anima a los niños a hacer locuras
- Escalen bajo techo
- ¡Saca tus viejos DVD de ejercicio, súbele el volumen a la música y haz que tus hijos se te unan!
- Jueguen a mantener el globo arriba
- Hagan un concurso de apilar o vean quién puede caminar más lejos con un libro sobre la cabeza
- ¡Bailen!
- El juego de las sillas
- Pista de obstáculos bajo techo
- Boliche
Actividades para después de clases
A veces, caminar a casa después de un largo día de escuela es una actividad física más que suficiente para nuestros hijos. Pero si no vives cerca de la escuela, o si es conveniente que tus hijos hagan más actividad, a continuación presentamos una lista de actividades después de la escuela que los mantendrán físicamente activos:
- Clases de baile
- Natación
- Deportes en equipo
- Gimnasia
- Artes marciales
Actividades para niños más grandes
Por supuesto, cuanto más crezcan los niños, más querrán tomar sus propias decisiones. Pero también puede ser un momento en que necesiten más orientación o un impulso extra para ponerse en movimiento. Además de los deportes en equipo, y todas las demás actividades adecuadas para la edad que se mencionan arriba, a continuación, te presentamos algunas otras ideas para los adolescentes:
- Apúntense en un gimnasio o en una clase de entrenamiento al aire libre específicamente para adolescentes
- Bochas
- Cinta tensa
- Disco Volador
- Ciclismo de montaña
- Surf
- Skateboard
Los dispositivos electrónicos no tienen que ser el enemigo. Los niños también pueden obtener un buen entrenamiento al jugar videojuegos específicos. Pero, cuando predicamos con el ejemplo y les inculcamos el deseo de ponerse en movimiento primero y después pasar tiempo frente a una pantalla, naturalmente ese tiempo disminuirá y priorizarán querer moverse más.
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